La
puesta es una adaptación de textos del libro "Vagones transportan
humo" del dramaturgo y actor argentino Alejandro Urdapilleta.
Se
trata de una pieza teatral cargada de ironía, que sintetiza la relación de dos
personajes encerrados en la tóxica decadencia de "Ella": un ser
decrépito, ostentoso, repulsivo, es decir, típicamente humano. Marilú, quien la acompaña, soporta
incondicionalmente los pensamientos despiadados y paranoicos de Ella, así como
la declaración de sus sentimientos más íntimos.
Lo
monstruoso, el deseo sin contención, la muerte, el sexo, lo prohibido, lo
onírico, la enfermedad, lo humillante, lo perverso, la locura, el odio, lo
políticamente incorrecto, todo aquello que escapa a un mundo organizable dentro
de los límites de la razón, es la materia de estos personajes.
En
la puesta lo obsceno es desplazado por una poética de lo visible que, sin
embargo, evita la redundancia llana de lo explícito y se desvía hacia una
poesía del derroche y del desborde.
La
intención de usar los textos de Alejandro Urdapilleta es una excusa para poner
en manifiesto lo más oscuro y horrendo del ser humano. En una puesta
minimalista, donde la preponderancia está en el cuerpo del actor y la actriz y
basta una mesa para ver la casa en decadencia, donde viven estas peculiares
mujeres.
La
obra es protagonizada por Sofía Fernández y Matías Sanders bajo la dirección de
Mauro Oteiza y Vicky Pezzutti del grupo de gestión y producción teatral
Semillero.